miércoles, 15 de mayo de 2013

Manual básico de Fray Huerto


Manual básico 

de 

Fray Huerto




1      Beneficios del huerto urbano en casa
Como sabemos todos la mayor parte de la población vivimos en ambientes urbanos sin ningún contacto con el medio natural y rural, este no es nuestro caso porque vivimos en Boecillo y hay muchos parques, jardines y en casa tenemos tiestos. Pero ¿sabemos los cuidados que necesitan las plantas? ¿Sabemos cómo se planta? ¿Sabemos que hay que abonar y cómo podemos hacer ese abono? Bueno, vamos a ir poco a poco….
¿Por qué es bueno disponer de un pequeño huerto en nuestro hogar? Porque una de las ventajas es que  vamos  a suponer de una vía de escape frente al asfalto, el cemento, el ruido, la contaminación y también frente al estrés y las preocupaciones. ¿Qué os parece esta ventaja? ¿Hemos pensado esto alguna vez?
Además, nos va a permitir conocer el ciclo de vida de los vegetales y las relaciones entre distintos seres vivos, que damos en el colegio en conocimiento del medio, pero en este proyecto potenciamos la capacidad de observación y experimentación.  Es un recurso educativo muy valioso para nuestros hijos que podemos empezar ahora en vacaciones pero podemos continuar durante todo el año. Con la ayuda de nuestro párroco, David y las catequistas. Pero también desde casa, los padres, las madres, los abuelos… nos pueden ayudar y hacer nuestros pequeños huertos. Más adelante podemos ver que nos pueden servir de adorno para casa, para el colegio (El ciclo del agua en una urna) tiempo al tiempo.
Gracias a este proyecto, un lugar de aprendizaje continúo a través de la experiencia que vayamos adquiriendo en el cultivo de nuestras hortalizas, plantas aromáticas y verduras.
Por otro lado, nos proporcionará alimentos sanos, nutritivos y sabrosos que nos harán pensar en el origen de los alimentos, convirtiéndonos en consumidores más responsables. No tirar la comida o si se estropea para aprovecharlo para hacer abono. 
Estos alimentos, serán para nosotros y para compartirlo a través de un MERCADO SOLIDARIO para personas necesitadas o alguna organización solidaria.
Entonces, después de todo lo que hemos visto, ¿a qué sí merece la pena hacer nuestro huerto? 

¿Qué necesito para tener un huerto?
Lo primero que vamos a ver es qué necesitamos para tener nuestro huerto. Para ello, vamos a ver los factores que debemos tener en cuenta.
1 Un lugar con luz directa
Podemos crear un huerto prácticamente en cualquier lugar, un pequeño jardín, un patio, una terraza, un balcón o incluso una ventana nos va a permitir cultivar nuestras plantas. Pero hay una cuestión indispensable y necesario para realizar nuestro proyecto ¿sabemos cuál es? Pues claro que sí,  disponer de un lugar con luz directa.
Nosotros necesitamos la luz del sol para vivir y por ello también las plantas necesitan la luz solar para obtener energía a través de la fotosíntesis. En principio la mejor orientación será aquella que nos permita una buena cantidad de horas de luz directa, normalmente orientación sur o sureste. Tenemos que tener presente dónde queremos crear nuestro huerto porque hay lugares que aunque hay luz, no es directa o bien, todo el día nos da sombra. En estas ocasiones, si no podemos hacerlo en el suelo, utilizaremos macetas u otros sistemas para que nuestras plantas “alcancen” la luz directa.  Vamos a ubicar nuestro huerto y a adaptarnos al espacio o lugar que disponemos. Recordad que podemos hacer un huerto en un metro cuadrado…
Otra cosa que vamos a tener en cuenta es la disponibilidad de luz que tenemos en las diferentes épocas del año. No es lo mismo verano que invierno, ni primavera y otoño. También tenemos que valorar qué tipo de cultivo vamos a realizar. Para ello, haremos un calendario de cultivos y nos informaremos de lo que podemos plantar en cada mes del año o en cada época del año.
Entonces, según lo que hemos visto hasta ahora,  en función de la insolación que tengamos elegiremos las hortalizas, verduras o plantas que cultivaremos.
2 Recipientes y sustratos
Para crear nuestro huerto, vamos a disponer de dos espacios o lugares. Uno, en la calle, al lado de la Iglesia, donde tenemos a la Virgen. Para poner nuestras plantas aromáticas y ornamentales. Por otro, en el patio de los locales parroquiales es otra zona para destinar nuestro huerto, delimitando el espacio y aportando al suelo abonos orgánicos que mejoren sus condiciones físico-químicas y su fertilidad. Como no disponemos de suelo, podemos crear nuestro huerto usando recipientes de cultivo y sustratos orgánicos. Más adelante daremos ideas de cómo podemos hacerlo.
- Recipientes:
 Los recipientes los vamos a elegir teniendo en cuenta el lugar y espacio donde vamos a realizar nuestro huerto.  Como sabemos, existen recipientes de todos los tamaños y todos los materiales. También podemos reutilizar y reciclar materiales. Vamos a ver algunos ejemplos a ver qué os parecen.  Nuestras ideas para recipientes son:
-          La mesa de cultivo, con diferentes longitudes, anchuras y alturas.
-          Las jardineras.
-          Lo que más nos gusta a nosotros es innovar, sor María os va a sorprender....
     
- Sustratos:
Nosotros comemos y bebemos todos los días. Las plantas también, además de tierra, agua y luz, necesita abono, alimentos para ellas. Lo más adecuado es usar sustratos orgánicos, los cuales deben ser ligeros, para permitirnos su manejo con facilidad y no echar mucho. Un poco porque sino también se estropean. Imaginaros cuando coméis mucho como os duele la barriga. Pues lo mismo las ocurre a las plantas.
Hay que darles una  adecuada porosidad, que permita una buena aeración (circulación del aire que permita la respiración de las raíces) y retención de agua (que permita que se cree una reserva de agua en el sustrato a disposición de las raíces). Ya veremos qué abono necesitamos, para ello en los viveros nos informan del mejor para cada planta.
Una cosa muy importante: Cada vez que acabamos un ciclo de cultivo y retiramos las plantas, es conveniente remover el sustrato para evitar la compactación que éste sufre con el tiempo, para mejorar la porosidad y evitar la formación de grietas, además de hacer una nueva aportación de abono, para reponer los nutrientes.
3 Sistemas de Riego para el Huerto
Es muy importante cómo regamos nuestras plantas. No debe faltar pero tampoco que sobre. Para ello, lo más fácil par nosotros es  regar de forma manual.  Usamos una regadera o nos fabricamos una. Es otro taller que haremos para aprender a hacerlas.
4 Semillas y Plantones
En este momento, ya sabemos muchas cosas, como  el espacio con el que contamos,  los recipientes que vamos a usar, el abono y la forma de riego, sólo nos queda conseguir las plantas que vamos a cultivar, las cuales las podremos desarrollar a partir de semillas o de plantones.
Como nuestra primera experiencia va a ser en el mes de julio, veremos qué podemos plantar y así lo haremos. Podemos traerlo de casa o visitar el vivero de Boecillo. Allí nos informarán de qué y cuándo podemos plantar.
Poco a poco, vamos a ir adquiriendo experiencia, por lo que vamos a poder ir combinando el uso de semillas y plantones. ¿Nos damos cuenta de que ya somos agricultores? Pequeños agricultores… porque nos falta mucho por aprender, pero en poco tiempo hemos aprendido muchas cosas.  Además en muy poco tiempo, vamos a obtener nuestros propios cultivos, vamos a poder seleccionar las plantas más resistentes y que mejor cosecha nos haya dado para volver a plantar. Por eso es un CICLO.

A cultivar nuestro huerto...
Sembrar, trasplantar y cosechar, son sin duda las tareas más divertidas del huerto. ¿Qué debemos hacer en cada una de ellas?
1 Siembra del huerto
Según lo que vayamos a sembrar, La siembra la podemos hacer en un semillero o directamente en su lugar.
Vamos a hacer nuestros propios semilleros:
Los pasos a seguir a la hora de realizar un semillero son:
Buscar un lugar donde le dé bastante el sol. Aunque luego por la noche (en semilleros no protegidos) haya que resguardar el semillero en otro sitio a salvo de las bajas temperaturas.
Poner el sustrato.
Sembrar. La profundidad a la que se entierra la semilla es 2 o 3 veces su diámetro.
Regar. A la hora de regar ha de utilizarse la regadera cerca del semillero y haciendo un movimiento pendular.
Clarear. Si han germinado varias semillas por alveolo hay que hacer un clareo dejando una plántula, la que veamos más fuerte. Es decir, quitar las más pequeñas y dejar las más fuertes.
Vamos a tener nuestro taller de ilustraciones y tarjetas. Vamos a nombrar lo que vamos a sembrar para que no se nos olvide. También haremos tarjetas con la información técnica (dibujo, nombre genérico, características plantación, época,…). Esto os lo irá explicando Sor María.
2 Trasplante
Cuando las nuevas plantas germinadas tengan varias hojas y su altura es superior a la del envase, habrá llegado el momento de hacer el trasplante, pero para ello vamos a tener en cuenta:
-          Sacar el cepellón del recipiente, saldrá más fácilmente si está algo húmedo.
-          Plantar en el recipiente definitivo.
-          Regar abundante.
3 Cosecha de frutos en el huerto
Es lo que más nos va a gustar después del trabajo en el huerto, pero hay que saber cogerlo  y elegir el mejor momento para recolectar.  Cuando estén maduros y en su punto.
Algunas plantas nos permitirá ir recogiendo hojas y volverán a salir (ej. Acelgas) pero dependerá de lo que plantemos y en nuestras tarjetas iremos añadiendo toda la información sobre ello.
Por ejemplo,  con ajos y cebollas, tendremos una cosecha si lo recolectamos antes  más tierno o bien, si nos gusta más secos, los dejamos más tiempo.

El Huerto Ecológico
Bien, en este momento ya hemos aprendido muchas cosas de nuestro huerto urbano y además ya somos pequeños agricultores teóricos y prácticos. Pero, ¿qué es un huerto ecológico? Es un huerto sostenible, es decir, un espacio donde obtenemos unos productos sanos y sabrosos y no usamos plaguicidas ni fungicidas. En nuestros cultivos aparecerán todo tipo de insectos y otros organismos, que conformarán el "microecosistema" en el que se irá convirtiendo nuestro huerto urbano.  Nos servirán para el estudio y observación de toda esta "vida" y las relaciones que se establecen entre los distintos seres vivos.
El principal método de control y lucha contra las plagas y enfermedades que debe de llevar a cabo el agricultor ecológico, debe de ser "hacer las cosas bien". Es decir, realizar todas aquellas prácticas que van a hacer de nuestro pequeño huerto un espacio fértil, resistente, estable, biodiverso, etc. Algunas de estas prácticas son: las rotaciones, las asociaciones, el uso de materia orgánica como único abono de nuestros cultivos, realizar un riego adecuado, etc.
Ahora bien,  siempre va a ver algunos seres vivos que se instalan en nuestro huerto pueden ser perjudiciales e incluso convertirse en una plaga u ocasionar enfermedades en nuestras plantas. En estos casos, debemos identificar las causas y actuar mediante procedimientos ecológicos.
Podemos diferenciar 2 tipos de problemas en nuestros cultivos:
-          Enfermedades, producidas por hongos, bacterias y virus.
-          Daños por plagas, de animales, sobre todo insectos y arácnidos.
1 Enfermedades en el huerto
Son más difíciles de diagnosticar y de tratar porque no vamos a observar directamente al causante del problema y tendremos que diagnosticarlo observando sus efectos (ej.: "acucharamiento" de las hojas del tomate producido por el virus de la cuchara).  Por eso, vamos a prevenir fortaleciendo nuestras plantas con buenos abonos orgánicos como el humus de lombriz y con fertilizantes ecológicos como el extracto de ortiga.
También podremos utilizar en el caso de enfermedades por hongos, que suelen ser las más comunes (como el oídio, el mildiu o la negrilla) tratamientos más específicos que os iremos diciendo y buscaremos información dependiendo de lo que vayamos a plantar. Haremos nuestro cuaderno de naturaleza: que irá apareciendo las plantas que vamos a cultivar con todos sus datos y dibujo,  nuestros amigos los animales de  nuestro huerto (lombriz y sus beneficios), de enfermedades y plagas, nuestro calendario…
2 Plagas en el huerto
Son más fáciles de identificar porque las podemos observar directamente al agente causante del problema. Diagnosticamos, evaluamos y buscamos soluciones ecológicas.  Dependerá si son insectos beneficiosos como las mariquitas o bien dañinos.
Por ejemplo, la eliminación manual de los insectos. Ésta es una forma muy eficaz de controlar las plagas en huertos de muy pequeñas dimensiones, como los huertos de terraza o balcón y frente a plagas muy visibles como las orugas defoliadoras. Nos pondremos unos guantes y lo haremos con mucho cuidado.
También existen los tratamiento con productos ecológicos  como:
Jabón potásico: Se utiliza sobre todo para el pulgón, la cochinilla o la mosca blanca.
Aceite de neem: mosca blanca, minador, araña roja, trips, pulgones, piojo, escarabajo de la patata, chinches.

¿Qué puedo cultivar en mi huerto?
 Esto ya lo iremos viendo con mi cuaderno de campo...

El huerto con niñ@s
Pues ya hemos aprendido un montón de cosas. Como vemos, un huerto es una actividad muy relajante, entretenida, una oportunidad para compartir una experiencia y  un recurso didáctico. ¿Qué más queremos?
Con ello aprendemos el Ciclo de la Naturaleza y el ciclo de las plantas.  Una experiencia muy bonita es en una urna transparente realizar nuestro microsistema.
Participamos todos  activamente en todas las etapas del cultivo. Durante la siembra, el trasplante, la preparación de los sustratos o la observación de las plantas. Participan manipulando la tierra, observando las distintas etapas de las hortalizas que cultivamos, realizan diferentes talleres y se lo pasan fenomenal. 
Gracias al huerto, adquirimos  responsabilidades y somos así más  conscientes del valor de sus actos y del esfuerzo que implican, siempre y cuando lo planteemos  como una tarea divertida y no como una obligación.
Además, tenemos la recompensa de tanto esfuerzo, de sentirnos  satisfechos y orgullosos del trabajo realizado, cuando recogemos la cosecha.
Muy importante es que a través del huerto les inculcamos hábitos de alimentación variada. De alimentos sanos, ricos en vitaminas y minerales. Es una manera divertida de fomentar las verduras y probarlas.
Realizaremos un taller de cómo podemos presentar de forma divertida estos platos, sobre todo a los más pequeños. Y finalmente, los últimos días los padres, madres, familiares y amigos van a ver todo nuestro trabajo.  Un mercado solidario.
Con Sor María, aprenderán a hacerse delantales y fofuchas jardineras. Os informará de la higiene en estos productos y a emplatar.... ya lo iréis viendo poco a poco y disfrutaremos juntos estos días.